Para envasar los mejores pimentones de Murcia se fabrican desde 1880 estas enormes latas decoradas con arte y color. La lata de La Purísima es uno de esos objetos entrañables que veíamos de niños en las tiendas de ultramarinos o en las fresqueras de las casas de pueblo.
Hoy las hemos rescatado directamente de la fábrica para decorar cualquier rincón de tu casa y evocar olores y colores de la infancia, o para acompañar los cantos tradicionales como antes, cuando a golpe de percusión se alargaban las sobremesas familiares y fiestas populares.